jueves, 3 de septiembre de 2020

LIBERACIÓN

 

En la larga noche insomne 

volviste a visitarme llama incesante 

logrando causar estragos en mi.


Abrasado al furor de aquel rescoldo 

me retorcía probando mi propia carne cual elixir divino 

embriagado en un cóctel de hormonas deliciosas al cual sucumbí...

¡Y si soy humano si siento! 

Y anoche mis carnes querían mecerse y salir a pasear o tomar el aire que aprisionadas se sentían. 

Y me levanté en medio de ese sueño ardiente que resulta era realidad pidiendo a gritos placer, placer, placer. 

Y salieron a borbotones a jugar...